Para quién:
Cuando la sudoración intensa interfiere con las actividades diarias y los antitranspirantes no funcionan, usted puede ser un candidato adecuado para el tratamiento con toxina botulínica.
Plan de tratamiento:
La toxina botulínica está aprobada para tratar los síntomas de la sudoración intensa en las axilas cuando los medicamentos tópicos no funcionan lo suficientemente bien. La toxina botulínica se inyecta en las áreas afectadas para ayudar a controlar esta afección bloqueando temporalmente las señales químicas de los nervios que estimulan las glándulas sudoríparas. Cuando las glándulas sudoríparas no reciben señales químicas, la sudoración intensa desaparece.
Las inyecciones de Botox no afectan el tacto ni la sensación en el área de la axila.
Duración del procedimiento:
30 minutos
Comienzo:
La mejoría clínica generalmente ocurre dentro de la primera semana después de la inyección.
Duración de la acción
La sequedad suele durar 6 meses.
Se puede administrar una inyección repetida de BOTOX cuando el efecto clínico de una inyección anterior disminuya y el médico tratante lo considere necesario.
Qué hay en inyección:
Toxina botulínica